“Se cumplen hoy 147 años desde la fundación de nuestra ciudad, no son muchos si lo vemos desde una perspectiva histórica pero sí son suficientes para que la vida y las circunstancias nos hayan puesto a prueba como pueblo muchas veces”, comenzó su mensaje el actor y director teatral Martín Urbaneja, durante el acto central por el 147° aniversario de Trenque Lauquen.

Y agregó: “Decía el artista y escritor John Berger las huellas no son solo lo que queda cuando algo ha desaparecido, sino que también pueden ser las marcas de algo que va a revelarse”.

“Sin lugar a dudas mirar retrospectivamente en la vida implica reconocer las huellas que han quedado marcadas en nuestro devenir histórico, pero también nos convoca el desafío de recorrer juntos nuevos caminos en un mundo cada vez más complejo desafiante e incierto”, subrayó.

“Escribo esto para recordarme quién soy porque yo nací sin saber quién era, escribo para que vuelva a brotar la memoria; Trenque Lauquen lleva desde su propia nomenclatura sangre aborigen, Trenque Lauquen, laguna redonda en lengua mapuche, ciudad donde nací, crecí y aún sigo siendo parte de su frondosa y variada actividad cultural”.

Tras mencionar distintas expresiones artísticas, las que se desarrollan también en Trenque Lauquen, el actor consideró que “el arte restaura y sana, cura y en la medida en que podamos seguir planteándonos interrogantes vamos a ir respondiéndonos aquellas preguntas que inquietan y duelen y de ese modo algo se acomoda dentro nuestro y de los espectadores o eso pretendemos al menos”.

“Somos parte de un país que no está educado para reconocer su origen fundado sobre un genocidio, ser consciente de esto no significa resignación; tanto los que están peleando por recuperar sus territorios como los artistas, los historiadores, los académicos, nuestros vecinos vamos construyéndonos para empezar a entender nuestros orígenes y asumir sobre qué sangre se nos fundó”, reflexionó Urbaneja, para agregar que “a partir de ahí, podemosreconocer que hay una reparación que se debe llevar a cabo”.

El actor destacó en este sentido “la importancia que tienen los aniversarios y las conmemoraciones, ya que nos permiten ejercitar las memorias individuales y colectivas no solo para revisar críticamente nuestro pasado sino para poder pensar en lo que vendrá”.

Para finalizar sostuvo: “Como un tremendo viento, dicen que fue el Malón, un torbellino contra los días y eso que los antiguos eran duros como rocas, firmes; ahí quedó su sangre desparramada contaba mi abuela y tu recuerdo está en la tierra a la que abrazo para encontrarte para volver a ser tierra”.