En la antesala de la Segunda Edición de Tango al Aire Libre, los milongueros de la ciudad tuvieron anoche, en el Patio del Centro Cívico, la juntada de todos los miércoles que convoca Tango en la Calle, la movida que comenzó en enero y se extenderá también durante todo este mes y a la que

cada vez se acercan más vecinos.

Tango en la Calle, del mismo modo que la Segunda Edición de Tango al Aire Libre, es organizado por la Escuela Malajunta con el acompañamiento de la dirección de Cultura, y durante dos horas, de 21 a 23, convierte a los dos patios del Centro Cívico, el cubierto y el que está a cielo abierto, en una pista donde bailarines experimentados y principiantes comparten un buen momento al compás de la música ciudadana.

Se trata de una iniciativa libre y gratuita en la que cabe destacar la cantidad de vecinos y vecinas que aprovechan para tener su acercamiento bautismal al tango baile, animándose a los primeros pasos guiados por otros compañeros ocasionales de pista, o simplemente van a disfrutar escuchando unos tangos y milongas y ver cómo otros ponen la música en movimiento.