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“Me cuesta mucho hablar el 2 de abril, ya se me va a pasar, uno viene a este acto tranquilo, muchas veces pensando cuál es el mensaje que quiere transmitir, pero reiteradamente nos pasa que cuando vemos y escuchamos, hay algo que se nos mueve adentro y nos tira la estantería abajo”, dijo el intendente municipal, Miguel Fernández, visiblemente conmovido durante su mensaje en el acto por el día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas.

“Escuchábamos recién las canciones de (los artistas) Alejandro Lerner, Víctor Heredia y León Gieco, y para los que vivimos en esa época tumultuosa de 1982, es imposible que no se nos mueva algo adentro”, subrayó el jefe comunal, para señalar que “lo que pensábamos decir queda ahí tirado y lo que sale son las palabras del corazón”.

“Muchas veces me pregunto por qué nos pasa esto, por qué cada 2 de abril lo que parecía enterrado vuelve a salir a la luz, por qué ese dolor que teníamos el 2 de abril vuelve a estar en carne viva y no hay forma de que eso no nos pase si no entendemos lo que nos pasó y ojalá que cada 2 de abril nos siga doliendo, el día que no nos duela más quiere decir que enterramos la historia de Malvinas y pasó al olvido”, subrayó.

Y agregó enfático:  “Ojalá que nunca pase, pero somos nosotros los responsables para que eso no pase, los grandes, la memoria de los que no están y todos estos chicos, necesitamos que los chicos entiendan lo que pasó y la única forma de que no vuelva a repetirse es entender lo que pasó”.

Al respecto sostuvo que “nadie duda que las Islas Malvinas son argentinas, por miles de motivos, geográficos, históricos…, pero a veces alguien o algunos toman decisiones egoístas, mezquinas para lograr objetivos que no son nobles, que son rastreros y miserables”.

“La dictadura militar del ’82 estaba en retirada, pero necesitaba un manotazo de ahogado, algo que la rescatara para poder seguir adelante y no encontraron mejor manera que apropiarse de una historia noble para un fin espurio, y eso no solo es lamentable, también es repudiable, y no merecen el respeto de ninguno de nosotros”, sostuvo Fernández.

El Jefe comunal sostuvo que “Malvinas tiene enorme cantidad de historias de héroes, pero también de muchos traidores, a algunos los habrá juzgado la historia y a otros los juzgamos nosotros, los contemporáneos, y para que esos dictadores mezquinos y miserables no vuelvan necesitamos que la escuela los eduque de una manera distinta, que los eduque en valores, para la paz, para la diversidad y la tolerancia, para el diálogo, no para la confrontación o el mesianismo”.

En este sentido puntualizó que “necesitamos que nuestros docentes eduquen a nuestros hijos en esos valores que son la garantía absoluta de que esos supuestos líderes no regresen, y lo paradójico es que esos líderes de la dictadura militar en la Argentina se siguen reproduciendo en el mundo, porque a nosotros nos duelen los muertos de Argentina en las Malvinas, nuestros hermanos, pero hoy también nos tienen que dolor los muertos en la guerra de Ucrania y Rusia”.

“No hay muerte que valga la pena, no hay guerra que valga la pena, no hay argumento posible para justificar una muerte por eso es que nos duele tanto, que nuestros hermanos hayan muerto en las Islas por una guerra sin sentido, muchos quizás ni siquiera sabían para qué estaban ahí, pero con la bandera y la escarapela les salió de adentro lo que le sale a cualquier argentino que es ir para adelante”, dijo Fernández.

En este marco, criticó la “locura” que tiene hoy el ser humano que “no mide consecuencias a la hora de resolver conflictos que deberían ser resueltos de manera pacífica y armoniosa, no hay muerte que se explique, no hay guerra que se justifique”.

Asimismo, expresó que “días atrás, cuando recordábamos el 24 de marzo (Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia), hacíamos un paralelismo entre los desaparecidos de la dictadura y nuestros muertos en Malvinas; cómo no haber un hilo conductor si tiene que ver con lo mismo, con la locura de algunos pocos o unos tantos que no midieron consecuencias”.

“Pero nosotros tenemos que seguir adelante, recomiendo un reportaje a Omar De Felipe, un entrenador de fútbol, combatiente de Malvinas; 20 años, había terminado la colimba y tres meses después lo convocaron de vuelta y en dos días estaba arriba de un colectivo yendo al Palomar para ir a Río Gallegos”, contó Fernández, para describir lo que se vivía en aquel momento y con lo que se encontraron en las Islas de acuerdo al relato de De Felipe.

“Armas que no servían, ametralladoras que no cargaban las balas, incluso contaba en su historia que cuando fueron a reclamar porque la ametralladora no funcionaba les dijeron: Pasá y agarrá otra´, y medio ingenuo agarró una hermosa y nueva, y pensó que era una Ferrari -lo cuenta en el reportaje-, y cuando llegaron a Río Gallegos y empezaron a probar era una ametralladora de fantasía, no podían cargar la bala porque no servía y aún así, sin armamento y sin capacitación nuestros soldados fueron al frente y dieron batalla con ese orgullo que todos reconocemos porque pusieron el alma”, sostuvo.

También recordó que “los soldados ingleses cuando terminó el conflicto trataron bien a los soldados argentinos, el problema no era entre soldados, era entre políticos de un lado y del otro, que todos tenían objetivos poco nobles: acá (Leopoldo Fortunato) Galtieri y allá (Margaret) Thatcher, que jugaban al ajedrez con la vida de todos nosotros”.

“No merecemos los seres humanos ser piezas de ajedrez de alguna mente perversa, nunca más dijimos el 24 y nunca más decimos el 2 de abril, nunca más un argentino muerto por la imbecilidad de algunos: Nunca Más, pero para que el nunca más sea cierto tenemos que trabajar todos los días, tener presente el dolor para que nunca más pase”, dijo.

“Hoy un amigo, temprano a la mañana me dice no tenemos un hito en memoria de nuestros veteranos de guerra, el acto del 2 de abril lo hacemos en la plazoleta Marineros del Crucero General Belgrano, pero no tenemos un monumento, y lo tenemos que hacer, los concejales presentes me van a ayudar a pensar dónde, cómo y a quién convocamos para pensar ese monumento, pero Trenque Lauquen tiene que tener un monumento que recuerde a nuestros caídos en Malvinas”, anunció Fernández.

Y dijo que “merecen que cada uno que pase por ahí recuerde lo que fue el 2 de abril y la guerra de Malvinas, y esto tiene que ver con la memoria; muchos quedaron en las Islas y lo trágico, tan trágico como morir en las Islas o pero es haber vuelto vivos y muertos de alma, y muchos que se suicidaron porque no tuvieron contención del Estado, porque no solo los mataron cuando los mandaron a las Islas sino que los mataron cuando volvieron y tenemos que recordar todo eso porque la memoria que viene de la educación es lo único que nos garantiza que ningún argentino más muera por causas que no merezca, nunca más esa tragedia, como decía Víctor Heredia ocurra en la Argentina”.