“Un museo es un espacio de estímulos, es la puerta abierta a mundos distintos, es un organismo vivo, una red que dialoga y negocia con otras redes”, expresó el intendente municipal, Miguel Fernández, tomando palabras del escritor catalán y crítico de arte Jorge Carrión, al dejar inaugurado el sábado el Museo de Arte Mural Rodolfo Campodónico, el primero de su tipo en el país, “después de un largo peregrinar para concretarlo”.

El jefe comunal  agregó que “los museos no pueden ser una estructura muerta” y enfatizó que “por acá tiene que circular gente, tiene que vivir gente, porque el arte es lo que nos tiene que motivar a entender”.

“Se puede entender el mundo y educar a los chicos desde el arte, esto (el Museo) se tiene que aprovechar por las escuelas porque podemos entender nuestra historia para entusiasmar a los chicos más allá de un libro de textos”, añadió.

Fernández precisó que el “proyecto original comenzó hace tres años” y destacó el impulso original que le dio a la iniciativa  allá por 2007 el ex intendente radical, Juan Carlos Font, quien además era amigo de Campodónico y admirador de su obra, además del acompañamiento del entonces diputado provincial Nicolás Dalesio para conseguir la ley que cediera definitivamente a Trenque Lauquen la serie de 38 murales que narran la historia bonaerense, como era el deseo de su autor.

El intendente explicó también que como distrito y ciudad “buscamos un nicho de desarrollo para atraer a la gente que nos conozca y nos pareció que nuestra marca, por la historia, por los muralistas actuales y por Rodolfo (Campodónico), debía  ser Trenque Lauquen, ciudad de los murales”.

Los 28 murales de 2 mts. de alto por 3,60 mts. de ancho fueron pintados por  “El Flaco” Campodónico entre mayo de 1998 y agosto de 1999 y exhibidos en el exterior de la Casa de Gobierno de la Provincia, en La Plata. Años después, debido al deterioro por estar expuestos en el exterior, fueron retirados y se le encargó al autor la restauración de la obra completa.

En 2006, la Provincia cedió las obras a Trenque Lauquen en forma temporaria y luego, gracias a una ley, de manera permanente. Desde entonces la serie de murales estuvo en el galpón ferroviario, aunque después de estar hasta fines de 2007 abierto al público, el espacio quedó cerrado. Y en 2011 el Municipio decidió colocar una réplica en gigantografías en el frente del Museo Histórico Regional.

“Este museo también tiene otra cosa. Porque el muralismo fue una respuesta de acercar lo cotidiano al arte. Y este movimiento mexicano que llegó a la Argentina por el año ´30, no sin conflictos, no sin controversias, reflejaba eso: la vida del trabajo, de la opresión, de la injusticia. La verdad que todo eso  vale”, remarcó.