Con un sencillo acto en las calles Macaya y Melvin Jones, el municipio entregó ayer (miércoles) las 11 viviendas correspondientes al Círculo Cerrado ex Procrear, ubicadas en la Ampliación Urbana.

El intendente municipal, Miguel Fernández, encabezó el acto, acompañado por representantes del Concejo Deliberante e instituciones de la comunidad, funcionarios y vecinos, además del cura Juan Pellegrino y el pastor Sebastián Antonio, quienes realizaron la bendición de las casas.

El secretario General, Juan Simón Pérez, se dirigió a los presentes en primer término: “Nos estamos viendo seguido en este tipo de actos y vemos la sonrisa de aquellos que reciben la vivienda”, comenzó diciendo, para agregar que “antes existía popularmente el “le dieron una casa”; en realidad, se entrega una casa que los beneficiarios se ganaron con mucho esfuerzo y la pagarán para que otros también tengan su casa”.

“Estas viviendas (las dl ex Procrear) fueron una apuesta del intendente (Fernández). Todos los integrantes del equipo de gobierno le pusimos reparos cuando él empezó a trabajar en esta idea, porque nos estábamos moviendo de los moldes tradicionales. pero lo llevó igual adelante y tuvo razón”, reconoció, para anunciar la apertura de los concursos de viviendas en Beruti, Garré, Girodías, La Carreta y 30 de Agosto, que se hará mañana (viernes) en forma simultánea, e incluso las fechas de las respectivas aperturas de sobres.

Luego, la vecina Brenda Cantero, una de las beneficiarias, manifestó que para once familias era “un día muy feliz porque este sueño lleva una lucha de cinco años” en los que “el camino se empezó a llenar de piedras: viajes, planos, firmas sellos, entre otras y el precio del terreno era inalcanzable”.

Seguidamente se  refirió a la reunión que el Municipio convocó en el Centro Cívico “La Primera” y señaló que “recibimos la propuesta de alguien que se la jugaba por nuestros sueños, sabiendo que se  metía en un problema con su equipo de trabajo, pero igual planteó el desafío”, ratificando, así, lo que con sinceridad había expuesto el secretario General de la comuna.

“Fuimos privilegiados, elegimos un tipo de casa, materiales, detalles y supimos  cuál era nuestra vivienda desde el minuto cero”, añadió para agradecer a todos los funcionarios del Municipio que dirigieron el proyecto, al Concejo Deliberante y a los albañiles que trabajaron en cada casa.

La vecina extendió enfáticamente su agradecimiento “principalmente a esa persona que nos escuchó y transformó nuestro sueño en realidad, al señor intendente Miguel Fernández”.

Precisamente el intendente Fernández fue el encargado de cerrar los discursos: “Esto es el esfuerzo de mucha gente. No es que uno se la jugó. Uno ya pasó por eso y sabe lo que es luchar para tener una casa, y a veces para tener logros hay que correr riesgos. Recuerdo que en la reunión de Gabinete me decían que estaba loco, pero había una necesidad. Además yo sentía que el Estado había defraudado la confianza. Los tenía (a los inscriptos) a las idas y vueltas con papeles y parecía que lo hacía a propósito; me daba vergüenza ajena. Pero lo mismo nos pasa a nosotros cuando llevamos nuestros expedientes”.

“Era una obligación entenderlos y apostar”, afirmó, y explicó los beneficios de quienes confiaron en el Municipio, comparados con los que decidieron seguir con el sistema Procrear, respecto de la cantidad y monto de cuotas.

“Para tener logros hay que apostar y hay que creer. Yo me siento orgulloso de lo que hemos hecho. Hacer casas es complicado y dotarlas de infraestructura es muy caro. Acá (en la Ampliación Urbana) hay enterrados 70 millones de pesos, que es el equivalente a tres nuevas Guardias del Hospital”, precisó, y adelantó que además de estas 11 casas,  “el año que viene se entregarán 84 más”.

La construcción de la nueva Guardia del Hospital Dr. Pedro T. Orellana demandará una inversión de 22 millones de pesos.

Fernández explicó la tenacidad en las gestiones de viviendas. “Estoy feliz de hacer esto -aunque esté cansado- porque es ponerle el cuerpo a la necesidad de la gente”.

En relación a la Ampliación Urbana, indicó que es un sistema deficitario porque lo que se recauda y lo que se gasta aún no llegó al equilibrio.

Con respecto a los 160 lotes del Procrear, dijo que habló hasta con el Presidente (de la Nación, Mauricio Macri), para que se entreguen los lotes y los bancos financien la construcción de viviendas, junto a gestiones realizadas con los titulares de Banco Provincia y Nación.

“Vamos a seguir siendo esa ciudad admirada por muchos y ejemplo para copiar en todo el país”, finalizó.

En el acto se entregaron 10 llaves, porque uno de los vecinos avisó con anterioridad que no podría asistir y que pasaría luego por el Municipio.

El jefe comunal junto a Cristian Martínez, el subsecretario de Obras Públicas, Miguel Bulián, y el vecino Marcos Islas realizaron el tradicional corte de cintas.

Los adjudicatarios en esta oportunidad fueron:

  1. Gisella Sarratea.
  2. Pedro Hernández.
  3. Marcelo Andrade.
  4. Gustavo Fornes.
  5. Gerardo Savy.
  6. Leonardo Marcote.
  7. Brenda Cantero.
  8. Débora Valentini.
  9. Néstor Martín.
  10. Marcos Islas.
  11. Ricardo del Río.

VIVIENDAS

Estas viviendas no son todas iguales porque cada propietario pidió alternativas de construcción. Algunas cuentan con dos habitaciones, otras con tres y están ubicadas mayoritariamente sobre la calle Macaya cerca del Parque Lineal.

Las viviendas son de dos tipos: de 64 m² (cocina, comedor, dos  dormitorios, un baño y un pasillo) y 84 m² (cocina, comedor, tres dormitorios, dos baños y un  pasillo).

Estas 11 familias habían acordado con el Municipio la realización de un Círculo Cerrado especial que permitió solucionarles la situación de incertidumbre que hace más de cuatro años mantenían respecto de la concreción del plan de viviendas.