El pasado sábado, el Barrio Esperanza vivió una tarde patria con la celebración del Día de la Independencia en el Centro Integrador Comunitario (CIC), ubicado en Freyre y Pascual Laborde. El evento, organizado por la comisión barrial y con el acompañamiento de la Municipalidad de Trenque Lauquen, reunió a vecinos y vecinas en una propuesta que combinó cultura, recreación y el espíritu patrio.
El intendente Francisco Recoulat acompañó la celebración junto al secretario de Gobierno Martín Borrazas; el director de Abordaje Territorial, Francisco Martínez y el director de Relaciones Institucionales, Sergio Barbas.
Durante la jornada, el grupo de danzas folclóricas a cargo de la profesora Natalia Moreira —quien dicta clases en el CIC— ofreció una presentación en honor a la fecha patria, arrancando aplausos y sonrisas entre los presentes. Además, una colorida feria artesanal se instaló en el lugar, donde artesanos y emprendedores locales exhibieron y vendieron sus productos.
La profesora Raquel Crespo también se sumó a los festejos ofreciendo unas palabras con motivo del 9 de Julio.
Para los más chicos, hubo juegos, pelotero y una propuesta artística coordinada por la artista plástica María Chiampan, que invitó a crear y expresarse en un ambiente festivo.
Uno de los momentos más esperados fue el cierre, con chocolate caliente y tortas fritas, que se compartieron entre todos los asistentes. La leche fue donada por un tambo del distrito, y el delicioso chocolate fue preparado por Alicia y Sandra, integrantes de la comisión barrial, quienes también estuvieron a cargo de la elaboración de las tortas fritas.
“Salió todo bárbaro, hace rato que teníamos ganas de festejar un día patrio y todo estuvo muy lindo”, expresó Melina Trovatto, presidenta de la comisión barrial. Trovatto agradeció especialmente a los artesanos, al grupo de baile y al Municipio, que a través de las áreas de Relaciones Institucionales y Abordaje Territorial, colaboró con la infraestructura necesaria —como el gazebo, garrafas y mecheros— para que la celebración fuera un éxito.
Una verdadera fiesta popular, donde la identidad y el sentido de comunidad se hicieron presentes en cada rincón del barrio.